El candidato socialista a la alcaldía de Totana compareció en rueda de prensa para dar cuenta de algunas propuestas de su partido en lo que se refiere a la nueva forma de gestión del dinero público.

Juan Fco. Otálora repasó la situación económica del Ayuntamiento de Totana, que calificó de auténtico desastre. "Los responsables del dinero público han administrado como si fuera un cortijo, pero con el agravante de que no se trata de su dinero ni de su bolsillo", aseguró.

Dijo también que "las cuentas del Ayuntamiento es uno de los secretos mejor guardados de la derecha, pero los indicios y las filtraciones nos lleva afirmar, sin temor a equivocarnos, que la deuda municipal supera los 60 millones de Euros, más de diez mil millones de pesetas. Y cuando no se atreven a desmentirlo es que debe ser todavía más alta".

Añadió que "prometieron además no subir los impuestos y, en los últimos cuatro años, la contribución ha subido casi un 30 %, el mayor de los incrementos experimentados en una legislatura".

"Y mientras siguen gastando “con pólvora de rey”, dándose caprichos personales y organizando conciertos como el del viernes pasado, al que apenas acudieron trescientas personas, y que nos ha costado a todos los totaneros casi diez millones de pesetas", comentó Otálora.

"Ante tanta irresponsabilidad, ante tanto despilfarro y políticos manirrotos", el candidato socialista propone "un plan de reajuste serio que reduzca la deuda municipal y la lleve a límites razonables". También cree necesario que se haga una auditoria sobre los gastos municipales de los últimos cuatro años y que se dé a conocer ampliamente a todo el pueblo antes de que empiece el nuevo curso político.

Otálora dijo que "es necesario que se pague a todos los proveedores por riguroso orden, y que no se les pague primero a los amiguetes, y se eternice la púa de los que no son afines a la derecha". Para eso propone la creación de un registro de entrada de facturas y que se vaya pagando por riguroso orden.

"La transparencia en los procesos administrativos y a la hora de rendir cuentas será otra de las claves en el nuevo estilo de gestión económica para la etapa que se avecina. Se facilitará al máximo tanto la tributación (se bonificará con un 2 % todos los recibos domiciliados; se podrá fraccionar el pago de los tributos periódicos), así como el control por parte de la ciudadanía de las cuentas públicas. Más agilidad, más transparencia, más eficacia en la gestión del dinero de todos, será la estrategia del nuevo Ayuntamiento", concluyó Otálora.