Una delegación institucional del Ayuntamiento de Totana compuesta por el primer teniente alcalde, Juan Carrión Tudela, y el portavoz del equipo de Gobierno municipal, José Antonio Valverde Reina, asistirán en Roma a los actos de beatificación del mártir totanero José María Cánovas Martínez que se celebrará junto a la de otros 497 mártires españoles este próximo domingo, día 28 de octubre, en la Basílica de San Pedro de El Vaticano.

El alcalde de Totana, José Martínez Andreo, ha propuesto con motivo de este acontecimiento elevar al Pleno la realización de un reconocimiento público a la labor y trayectoria de D. José María Cánovas Martínez, así como dar el nombre de Beato José María Cánovas a una calle, plaza o lugar público de la localidad.

Asimismo, para conmemorar este gran día de reconocimiento universal de la Iglesia Católica a uno de sus más ilustres totaneros, el municipio acogerá el mismo 28 de octubre la celebración de dos actos litúrgicos en su honor, el primero de ellos a las 18:30 horas en la Iglesia del Convento de las Tres Avemarías, además de la celebración de otra misa a las 19:00 horas en la Iglesia Parroquial de Santiago.

Durante la eucaristía en acción de gracias en la Parroquia de Santiago, se bendecirá una placa homenaje en la capilla del bautismo, donde fue bautizado, para memoria y veneración del pueblo.

José María Cánovas Martínez, que nació en Totana el 9 de agosto de 1894, vivió en la calle Cuartelillo, en donde sus padres regentaban una panadería. En su infancia fue acólito en el Convento de los Padres Capuchinos y estuvo algún tiempo en la Escuela Apostólica que los Capuchinos tenían en Orito (Alicante).

Regresó a Totana y en 1909 ingresó en el seminario diocesano de San Fulgencio, donde fue ordenado sacerdote el 21 de mayo de 1921 y el día 26 de ese mismo mes celebró su primera misa en la Parroquia de Santiago en Lorca, en donde su hermano ejercía de párroco. Tuvo la dicha de estar acompañado por numerosos totaneros, entre ellos, por su madre.

Ya en octubre de 1921 fue nombrado coadjutor de la mencionada parroquia de Lorca y en septiembre de 1935 se hizo cargo de la Parroquia al ingresar su hermano en el Noviciado de la Congregación de la Misión y ejerció su ministerio sacerdotal en Santiago de Lorca hasta que el 3 de agosto de 1936 fue encarcelado.