El Pleno de del Ayuntamiento de Totana ha aprobado, con los votos a favor de los trece concejales del Partido Popular y en contra de los seis ediles del PSOE, las modificaciones parciales del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Totana, que ya se aprobó en su fase provisional en enero de 2007.
Este pleno extraordinario, que contenía sólo un punto en el orden del día, contenía cinco propuestas que fueron votadas de forma independiente por los corporativos; y ha estado marcado por la ausencia de los dos ediles de Izquierda Unida+Los Verdes que ayer anunciaron que no iban asistir.
En este pleno se ha aprobado por un lado el documento del Plan General, con el soporte estructural necesario para el desarrollo del modelo urbano previsto, y por otro lado una separata que contiene las sectorizaciones concertadas, es decir, los convenios urbanísticos.
El concejal de Urbanismo, Juan Carrión Tudela, explicó que esta división entre la parte sustancial del PGOU y la separata que contiene los convenios urbanísticos "facilitará previsiblemente la aprobación definitiva de la parte sustancial del Plan General por parte del órgano sustantivo de la Comunidad Autónoma, independientemente de los convenios urbanísticos y a salvo de eventuales resoluciones judiciales sobre los convenios que puedan ser objeto de investigación judicial".
Junto con el Plan General, los corporativos han aprobado también documentos complementarios a éste tales como el Plan de Impacto Territorial y la Evaluación de Impacto Ambiental, que acreditan la viabilidad ambiental del documento.
Carrión afirmó que el PGOU que se remitirá a la Comunidad Autónoma para su aprobación definitiva, tras un nuevo período de exposición pública en el sótano del edificio consistorial, es un documento “distinto y mejorado” al aprobado en enero de 2007 respondiendo a un modelo urbanístico diferente, de forma que las modificaciones previstas le otorgan “una personalidad propia, un crecimiento racional de los casco urbanos y una planificación sostenible de la población”.
Asimismo, puntualizó que se han estimado el 60% de las alegaciones presentadas, que en total fueron 4.642, las cuales van a ser contestadas todas de forma individual a partir de la aprobación del Plan, según precisó el edil de Urbanismo.
En este sentido, Carrión subrayó que con la aprobación de este PGOU, el equipo de Gobierno municipal ha realizado “un ejercicio de responsabilidad único” al dar cumplimiento a las demandas vecinales y del sector y al compromiso de revisar el documento.
También añadió que se ha dado respuesta a las demandas de las alegaciones realizadas al Plan en su aprobación provisional y afirmó que se ha trabajado bien para incorporar y mejorar todo lo que ha sido técnicamente posible.
De igual forma, adelantó que el documento de planeamiento se revisará cuando la población de Totana llegue a los 60.000 habitantes y anunció que se va a constituir una comisión de seguimiento que tendrá el objetivo analizar el desarrollo de la ejecución de las determinaciones del PGOU, y que estaría integrado por los tres grupos municipales.
De igual forma, el titular de Urbanismo recriminó a la oposición el hecho de no presentaran propuestas concretas en las mesas técnicas de trabajo celebradas y se limiten a pedir la dimisión del alcalde y los miembros del Gobierno y a demonizar la figura legar de los convenios “sin conocer los pormenores del Plan y sin dar cuenta de su modelo de política urbanística y de ordenación del territorio”.
Lamentó la ausencia de los dos concejales de IU+LV “adalides de la democracia participativa” que, según dijo, han hecho una “evidente dejación de sus funciones” en un tema de vital importancia para Totana y matizó que el Gobierno local se limita a responder al compromiso electoral fijados con la ciudadanía en esta materia.
En este sentido, criticó el hecho de que los grupos de la oposición pidan un documento del Plan consensuado y pierdan la oportunidad que se les brinda de no participar en él, no apoyando ninguna de los acuerdos separados de las propuesta –incluso aquellas que públicamente han defendido en los medios, en reuniones con el sector y en las mesas de trabajo- y reiteró la falta de respeto y la cobardía política de IU+LV con esta actitud.
Subrayó que éste es el documento del actual Gobierno municipal y corporación; y denunció el espíritu permanente de bloqueo que sostiene el PSOE para bloquear un documento que aboga por el desarrollo económico y social con el único fin de rentabilidad política.
El concejal de Urbanismo destacó que el documento prevé una serie de severas condiciones para el desarrollo de los sectores surgidos del convenio urbanístico que se traducen en unas restricciones y garantías superiores a las que impone la Ley del Suelo, y que serán especialmente sensibles en aquellas zonas más próximas a áreas de especial protección ambiental o aqueológica, como Sierra Espuña o Las Cabezuelas, entre otras.
Repasó los planes estratégicos de futuro que recoge el nuevo documento y añadió que, al margen de la demagogia política de la oposición, éste supone “una apuesta clara por el desarrollo económico, por la sostenibilidad y la excelencia urbanística, turística, ecológica y ambiental; y sobre todo da respuesta a las demandas generales de la sociedad totanera”.