El Presidente de APESE denuncia que "si quieren promocionar el turismo en lugar de hacer una jornada y comilonas disfrazadas de degustaciones gastronómicas, el Alcalde de Totana y el Director General de Medio Ambiente se debían dedicar antes a resolver el grave problema de vertidos de aguas fecales del complejo turístico público de la Santa".
"Responsables de la Dirección General de Medio Natural y de la mancomunidad turística de Sierra Espuña, presidida en este turno por el alcalde de Totana, José Martínez Andreo, han impedido el pasado viernes el acceso de 20 representantes directivos de APESE (Asociación de Propietarios del Entorno de Sierra Espuña) y de la Unión de Agricultores y ganaderos del Bajo Guadalentín (COAG) a la jornada sobre caza, turismo y desarrollo económico de la zona de Sierra Espuña, que se celebraba en el hotel de la Santa de Totana, con la única supuesta justificación de que debían de haber reservado su inscripción con una semana de antelación, lo que no se hacía constar en el folleto de la jornada", denuncian desde COAG /APESE en un comunicado.
"Entre los que pretendían acceder como oyentes de la jornada se encontraban los representantes de APESE y COAG en la Junta rectora del parque de Sierra Espuña y en la Junta de la reserva nacional de caza del arrui de Sierra Espuña, entidades que, según el folleto de la misma, eran coorganizadores del acto, junto con la Mancomunidad de municipios turísticos de Sierra Espuña (Aledo, Alhama, Totana, Pliego y Mula)", añaden.
Tras de negarles el acceso a la jornada los directivos de APESE y de COAG han colocado unas pancartas en el patio exterior del acceso al acto con slogan como:
- Parque de Sierra Espuña: 15 años de ilegalidades, incumplimientos y expropiaciones
- Arrui en Sierra Espuña: la carne para todos, los daños para los propietarios
- Caza en Sierra Espuña: Furtivismo triple
Asimismo los directivos de APESE y COAG han denunciado que "realmente la Jornada no era sino una excusa para organizar una “comilona” disfrazada de degustación gastronómica de carne de arrui. Un arrui que está en una Reserva nacional de caza y en un Parque que es propiedad privada en 1/3 de su superficie. Y que se ha alimentado casi exclusivamente de los cultivos agrícolas privados - los arrui no comen pinos – del interior del parque y la reserva y su entorno, produciendo importantes e irreversibles daños en los cultivos agrícolas, que el parque de Sierra Espuña se niega a indemnizar, a pesar de establecerlo así la ley".
Los representantes de APESE y COAG han entregado a todos los asistentes a las jornadas, en un intermedio de la misma, un folleto resumido "en el que se hace un exhaustivo y demoledor análisis de “los diez mandamientos incumplidos en el parque de Sierra Espuña sobre la reserva nacional de caza, la actividad cinegética y los daños del arrui y el jabalí” todos ellos regulados en un decreto del abril de 1995, en el que se establece el plan de los recursos naturales del parque de Sierra Espuña (PORN) que se ha incumplido sistemáticamente por el Parque y por la Administración regional en aspectos tan importantes como: la aprobación del plan de aprovechamiento cinegético y el desarrollo de sus directrices; el control de una cifra máxima de 250 ejemplares de arrui,-cuando se estima que existen 1000 –; la obligación de indemnizar los daños del arrui y el jabalí a fincas agrícolas; así como, entre otros, la obligación de haber realizado hace once años un informe al Gobierno Regional sobre el cumplimiento de la normativa y sobre la compatibilidad entre el Parque y la Reserva.Todos ellos incumplidos".
El Presidente de APESE, José Luis Hernández, ha manifestado que "esta jornada no era sino un acto más para respaldar la concesión de la Carta Europea de Turismo Sostenible al Parque de Sierra Espuña. Como también se pretende se conceda al Parque de Sierra Espuña la calificación de Bosque Modelo. Concesiones que APESE y COAG proponen se paralicen hasta tanto el parque regularice su situación".
Pero según el Presidente de APESE, "en lugar de dedicarse a organizar y gastar dinero en jornadas y comilonas, el Director General de Medio Ambiente – y también Presidente del Parque de Sierra Espuña y de su Reserva nacional de caza- y el Alcalde de Totana, deben de dedicarse antes a resolver problemas como el desarrollo de todos los planes pendientes en el PORN – el turístico incluido – así como especialmente un problema medioambiental tan importante para la promoción turística como el vertido de aguas fecales del complejo turístico propiedad del Ayuntamiento de Totana. Que está contaminando de forma irreversible, insalubre y peligrosa el suelo y el aire del corazón del mismo parque de Sierra Espuña, con aguas residuales que cruzan la carretera comarcal y con fuertes olores que son perceptibles desde cualquier vehículo que pase por las inmediaciones. Y por supuesto por los huéspedes del establecimiento turístico".
Según APESE y COAG "difícilmente el parque de Sierra Espuña puede recibir ninguna calificación de excelencia turística como la Carta Europea de turismo sostenible ni como bosque o parque modelo; cuando el único establecimiento turístico público del interior del Parque adolece de tan graves irregularidades. Y tampoco puede recibir la calificación de Parque o bosque modelo un Parque que además de tener tan graves deficiencias en su gestión, permite que en el corazón del mismo se viertan aguas que contaminan de forma irreversible su pinada. Y un parque que adolece de graves incumplimientos respecto de la casi totalidad de la normativa que lo regula".
Según han manifestado desde APESE y COAG, tienen la percepción de que "los responsables regionales de medio ambiente y del Parque y la reserva de Sierra Espuña gestionan el Parque como si fuese su cortijo o su coto privado, olvidando que existen unas leyes y unos órganos gestores y unas juntas que no convocan. Y que 1/3 del parque y de la reserva de Sierra Espuña es de propiedad privada. Y que esos propietarios no van a seguir permitiendo que desde la Dirección del parque se desprecien de forma continua sus derechos, y se incumpla impunemente de forma sistemática la normativa del Parque".