El Grupo Municipal del PP en Totana ha presentado una moción para el pleno de junio con el fin de instar al Consejo de Ministros del Gobierno de España a que articule mecanismos para que la devolución de los gastos financieros y tipos de interés sean asumidos por las entidades bancarias en la reestructuración financiera.

En la moción también se pide al Ministerio de Economía y Competitividad y al Consejo de Ministros a que se condicione, en esta reestructuración financiera, a las entidades bancarias a que fluya la reapertura de líneas de crédito a familias y pequeñas y medianas empresas (PYMES).

El anuncio hecho público este fin de semana por el Gobierno de España sobre la concesión por parte de la Unión Europea de hasta 100.000 millones de euros en préstamos al Fondo de Reestructuración y Ordenación Bancaria (FROB) para recapitalizar el sistema financiero español ha acaparado la mayoría de los debates políticos de los organismos y foros competentes por las consecuencias que tiene para el futuro de España y de la Eurozona.

A diferencia de lo sucedido con Grecia, Portugal e Irlanda, el de España es un rescate financiero; es decir, es el sector financiero, la banca, el que va a recibir la inyección de capital europeo, y no la economía entera, como en los tres países anteriores, ha dicho el portavoz del PP, David Amorós.

El concejal del PP ha expuesto en la moción que esta decisión mantiene la esperanza de que el rescate al sector de la banca española favorezca que fluya de nuevo el crédito, de una manera razonable, entre las empresas y las familias.

Aunque las condiciones no están muy claras, el ministro Luis de Guindos afirmó que el Estado era el responsable de devolver esa ayuda; que algunos expertos barajan que el préstamo pueda tener que devolverse a un interés del 3%, y de recaer ese interés en el Estado, lo que afectaría al déficit y a los consiguientes ajustes al bolsillo del ciudadano.

Al margen de que los detalles técnicos se definan en las próximas semanas, de forma que los fondos lleguen pronto a las entidades que lo precisen y sirvan de manera efectiva a la recuperación del crédito, el crecimiento y la creación de empleo, es fundamental que esta decisión no repercuta directamente sobre los usuarios, consumidores y contribuyentes, recoge en la moción.

Amorós señala que, todo lo contrario, pues más bien se deben facilitar las condiciones para la obtención de préstamos a las familias y a las pequeñas y medianas empresas que permitan activar el consumo y generar empleo.