"Las decisiones tomadas por el Gobierno del Partido Popular sólo consiguen agravar esta situación día tras día: una mujer debe trabajar 79 días más que un hombre para ganar lo mismo"

Juventudes Socialistas de Totana (JSTotana) pide al Gobierno, bajo su campaña “No vales menos que él” con motivo del Día Europeo por la Igualdad Salarial, que invierta en políticas de igualdad para garantizar, entre otros derechos, la equidad salarial entre géneros.

Para Pedro Antonio Martínez Cánovas, Secretario General de JSTotana “las decisiones adoptadas por el Gobierno del PP en materia laboral y de igualdad hacen que cada día empeore la situación de las mujeres trabajadoras. Es inadmisible que en pleno siglo XXI, en un país como España, una mujer deba trabajar 79 días más al año para cobrar lo mismo que un hombre”.

En opinión de Juventudes Socialistas, “en la mayoría de los casos, los puestos mejor remunerados o de mayor responsabilidad son un terreno casi exclusivo para los hombres, por no hablar de la igualdad de trato en el trabajo y de oportunidades laborales en general”. “Una brecha salarial del 24%, según los últimos datos proporcionados por UGT en su informe “Trabajar igual, Cobrar igual”, es inadmisible para un Gobierno que pretende dar la sensación de recuperación económica”– añaden.

Pedro Antonio Martínez Cánovas ha asegurado que “desde Juventudes Socialistas instamos al Gobierno y a las distintas administraciones públicas a implementar acciones concretas y específicas para eliminar esta lacra poniendo en marcha medidas correctoras, que permitan alcanzar la igualdad retributiva entre mujeres y hombres”. “Para alcanzar las retribuciones equivalentes a un hombre que trabaja durante 35 años – ha añadido Martínez Cánovas –una mujer debería trabajar 11 años y medio más, o sea, 46. Esto debe solucionarse con urgencia”

El Secretario General de JSTotana ha concluido expresando lLa brecha salarial se ha agravado en los últimos años en todos los sectores de actividad. Pero las mujeres siguen sufriendo más en las ocupaciones más feminizadas, que precisamente suelen coincidir con la que exigen menos cualificación y la brecha salarial se dispara a más de un 30%. ¿Hasta cuándo deberán aguantar las mujeres este desprecio a su valía?”