"Los cuatro grupos municipales del Ayuntamiento de Totana se ponen de acuerdo para acometer de forma exprés la aprobación del PGOU aun a expensas de obviar la ley y operar en un presunto fraude de la misma", según denuncian desde TUP.
"La decisión sui géneris en el último pleno de abordar la última fase del Plan general no es lo que se esperaba del equipo de gobierno.
No se explica que los que hasta hace poco eran acérrimos enemigos del Plan General de Morales al que combatieron y sobre el que vertieron las más graves descalificaciones pretendan ahora hacer entrar a la ciudadanía por una burla y amaño entre muy pocos.
Solamente se puede entender esta actitud como implicación presunta en intereses bastardos y particulares que no obedecen al interés general, y que constituyen una nueva vuelta de tuerca en la tramitación de un Plan corrupto desde el origen.
Escandaliza escuchar lo manifestado en el último Pleno por parte de los distintos responsables municipales, donde en un constante debate estéril, y que el secretario municipal que vela por la legalidad jurídica deje llevar esto adelante.
El gobierno municipal parece estar ajeno a la realidad jurídica que podría afectar al Plan General, ya que debe ser por lo aparecido en prensa que ha sido solicitada ante la Consejería la nulidad de dicho Plan y en trámite de contencioso-administrativo que terminaría anulándolo judicialmente.
Entra dentro de lo posible que se anule por el defecto de carecer de informe de CHS sobre recursos hídricos, y otros. Las sentencias del TS y del TSJ sobre este particular en otros municipios así lo han evidenciado.
Cuesta creer que los técnicos municipales del área de urbanismo den visto bueno a esta posición y acciones del equipo de gobierno con el alcalde a la cabeza, de espaldas a la realidad jurídica que podría sobrevenir y a la que desde Totana se da la espalda.
También es notorio y con honda repercusión en la prensa regional la querella recién admitida contra altos responsables del ejecutivo murciano, donde se está solicitando como medida cautelar la suspensión de todos los planes generales de los ayuntamientos que firmaron con el Ente Público del Agua, tal es el caso del de Totana.
Así sería una burla absoluta a los vecinos, representantes de colectivos empresariales, y hacia otros colectivos que en su día ya se manifestaron en contra de este Plan, que se siguiera adelante en la pretensión que margina la voluntad ciudadana y supedita el futuro de la ordenación del territorio a la decisión de unos pocos".