El alcalde de Totana, Juan José Cánovas, ha convocado, por vez primera esta legislatura, a los miembros de la nueva Comisión de Trabajo del Plan General de Ordenación Municipal, dando respuesta al mandato plenario del pasado mes de enero, con cuya nueva etapa se pretende aprobar el documento de forma definitiva y consensuada.

El orden del día de esta primera reunión incluye el estudio de la solicitud de subsanación de errores del Plan General de Ordenación Urbana del municipio, así como el plan de trabajo y calendarización a seguir en las próximas semanas.

El Pleno ya aprobó, en su sesión de enero, convocar de inmediato dicha Comisión de Trabajo, compuesta por un representante de cada Grupo Municipal, presidida por el alcalde y con la presencia de representantes de empresarios, sindicatos, colegios profesionales de Ingenieros de Obras Públicas, Arquitectos, Aparejadores y el equipo redactor del plan actual.

Además, se acordó, tras su valoración en la Comisión de Trabajo y previo informe de los técnicos municipales, subsanar los errores y deficiencias técnicas que fueron solicitados por la Consejería de Fomento en julio de 2015.

Paralelamente, se decidió iniciar un período de consultas a técnicos, profesionales y ciudadanos para elaborar un calendario de modificación del Plan General –una vez aprobado por la Comunidad Autónoma-, adaptándolo a la Ley del Suelo, surtiendo las modificaciones que se consideren y el Pleno tenga comprometidas.

La Comisión de Trabajo controlará los plazos y trabajos de la subsanación de errores y el proceso de inicio de futuras modificaciones y actualizaciones del PGOU.

Consenso político y social

El alcalde ha explicado que la pretensión es que el documento “esté lo antes posible”, promoviendo la búsqueda del necesario consenso político y social con el fin de que el documento quede aprobado de forma definitiva.

Además, ha señalado que “la idea es valorar si la subsanación se puede realizar y enviar el documento a la Consejería competente; y paralelamente, se abrirá un proceso de debate para adaptar el documento a las necesidades de la sociedad totanera”.

Al respecto, ha defendido la necesidad de “avanzar” en este campo porque “aunque no sea el plan ideal, es necesario desatascarlo por el interés general, dado que existen más de 400 licencias urbanísticas pendientes de aprobación, y afecta directamente a la actividad ganadera del municipio”.

Asimismo, ha abogado por la aprobación definitiva del documento porque la sociedad en general necesita una planificación urbanística ordenada y porque, no teniéndolo, esta situación genera inseguridad jurídica para inversores, más cuando hay municipios limítrofes que ya tienen el plan aprobado”.