Cerca de una veintena de jóvenes voluntarios participan desde el pasado 27 de julio y hasta mañana 6 de agosto en el VIII Campo de Trabajo Arqueológico en el yacimiento “Las Cabezuelas”, organizado por la Asociación para la Promoción Cultural y Turística de Totana “Kalathos” y que cuenta con la colaboración de las concejalías de Juventud y Yacimientos Arqueológicos.

Precisamente, las concejalas de ambos departamentos, Inmaculada Blázquez y Verónica Carricondo, visitaron hoy el yacimiento con el fin de conocer de primera mano los trabajos de excavación arqueológica que se están desarrollando durante estas dos semanas en el campo de trabajo.

Estos departamentos municipales, junto con Obras y Servicios, colaboran de alguna manera en la octava edición del campo de trabajo que se celebra este año, y en el que participan estudiantes y amantes de la Historia y la Arqueología de Totana, Alhama de Murcia, Lorca, Jumilla y Murcia, entre otros.

Este campo se viene desarrollando desde el año 2014 y en el mismo se realizan trabajos de excavación arqueológica en dicho yacimiento.

La actividad se desarrolla, concretamente, durante la última semana del mes de Julio y la primera de agosto, de forma que la intervención programada es acometida por un grupo de voluntarios y estudiantes de Historia, bajo la dirección de los arqueólogos, el totanero José Antonio González Guerao y Juan Antonio Ramírez Águila, con la pertinente autorización y supervisión técnica de la Dirección General de Bienes Culturales.

La importancia de este yacimiento es patente por las innumerables referencias que lo aluden desde al menos inicios del siglo XX; y a nivel regional se encuentra situado como exponente y de alusión indispensable en cuanto, a lo que priori, parece su fase más importante, la ibérica.

Ha sido sometido a diversas actuaciones, probablemente de prospección, que unido a la única intervención, hasta el año 2014, han propiciado que se encuentren varios conjuntos de materiales en diversos museos de la Región.

El yacimiento es conocido desde antiguo, y ya a principios del siglo XX, Rogelio de Inchaurrandieta, descubridor de La Bastida, aborda su importancia del mismo, de igual manera que lo hizo el investigador Juan Cuadrado Ruiz.

La actuación llevada a cabo en el yacimiento de Las Cabezuelas abarca un proyecto de investigación global que pretende llevar a cabo diversas actuaciones esenciales para la recuperación del yacimiento.

Durante las intervenciones de las campañas de los años 2014 y 2015 se ha procedido al inicio de las labores de reexcavación del área intervenida en los años 70, cuya actuación fue encaminada principalmente a la limpieza y finalización de la excavación en algunos sectores, así como a la recuperación de información arqueológica.

De igual manera, se ha avanzando en la recuperación del área donde las actuaciones clandestinas habían dejado al descubierto elementos estructurales de interés.

Ésta se sitúa en el sector noroeste, próximo al cantil orientado hacia la rambla.; y entre las “toperas” se podían apreciar lienzos murarios, entre los que destacaba una estancia conformada por potentes muros entre los que se insertaban grandes sillares perfectamente labrados que denotaban la presencia de una estancia de entidad, como pudimos comprobar tras la intervención.

En las campañas precedentes, permitieron confirmar la presencia de varios silos, los cuales proporcionaron objetos y restos materiales muy interesantes, entre los que destacan cerámicas andalusíes y un molino de cronología romana.

Por otro lado, se ha hallado una vivienda islámica, separada de las estructuras romanas por una calle y una amplia plaza. También se han hallado las estancias noroccidentales, las cuales estarían orientadas hacia un patio central. Sobre estos restos se hallaron un conjunto de materiales de época tardoantigua; elementos muy interesantes, ya que no teníamos constancia hasta la fecha de la presencia de esta fase histórica en el yacimiento. También se ha efectuado trabajos de dibujo arqueológico de las estructuras exhumadas hasta la fecha, topografía y restauración

En los últimos años apenas se habían realizado trabajos de excavación por la pandemia (el año pasado se tuvo que dejar el campo por el cierre perimetral de Totana), sino más bien de clasificación y ordenación de materiales arqueológicos localizados durante los trabajos de campo de las anteriores campañas.

El Ayuntamiento de Totana colabora con una aportación económica destinada a sufragar gastos de materiales, labores de topografía y dibujo, manutención a los voluntarios, entre otros; de igual forma que hacen otras empresas colaboradoras como la propietaria de los terrenos, Visanfer, y otras del municipio implicadas en el proyecto.