Realidad social y Covid

Seguimos en plena pandemia con un nivel de contagios inaceptable y en una FASE 1 que está destrozando económicamente a nuestro pueblo

Todos nos hacemos la misma pregunta. ¿Por qué?, ¿cómo hemos llegado a esta situación? Nadie puede contestar a estas preguntas, esta situación es el resultado de múltiples factores y muchos de ellos se nos escapan.

He visto con preocupación como se señala a determinados colectivos, haciéndoles responsables de la expansión de la pandemia, políticos, inmigrantes, etc. Estamos equivocados, la responsabilidad es nuestra, de cada uno de nosotros. Somos nosotros individualmente quienes podemos terminar con esta peste tomando todas las precauciones y medidas que sabemos.

Lo que ha hecho esta pandemia es resaltar los problemas sociales que tenemos, dejando una foto (que desde Cáritas Tres Avemarías conocíamos) desoladora. Expondremos algunos muy significativos.

Hemos detectado y denunciado ante las autoridades varios almacenes, donde las personas viven hacinadas como cerdos sin luz y sin agua. Este hecho no ha sido problema para la sociedad de Totana, no nos preocupaba, negamos esta realidad hasta que ha llegado el COVID, ahora con la pandemia es un posible foco de infección y entonces si preocupa a la sociedad. En estos almacenes viven la mayoría de los inmigrantes irregulares de nuestro municipio. La inmigración ilegal no es algo abstracto, SON PERSONAS.

Otro problema social es la falta de viviendas y el precio de los alquileres. Muchas personas para poder pagar la renta del piso, tienen que alquilar habitaciones. Muchos pisos están saturados y esto tiene una incidencia negativa en el contagio, ya no sólo hay que poner en cuarentena a una familia, hay que poner a varias.

Otro problema derivado de la saturación de las viviendas son los abusos, hemos detectado y denunciado abusos a menores por familias que alquilan una habitación a una persona, en muchos casos familiares directos.

Los niños son el eslabón más débil de esta cadena y a los que dedicamos más atención. Son los inocentes que sufren este caos que hemos creado entre todos. Durante este verano hemos trabajado para intentar que empezaran el curso en igualdad de condiciones que sus compañeros, les estamos apoyando en material escolar y libros. A las administraciones les hemos comunicado el problema de pobreza digital de muchos niños de Totana. Parece que son los colegios los que van a repartir recursos de la Consejería de Educación para paliar esta situación.

Como ven las carencias sociales agravan el problema, y el control de la pandemia se hace más difícil. Estos problemas ya estaban, y cuando salga la vacuna y se controle el virus estos mismos problemas seguirán, sumados a los nuevos que nos deje el COVID.

Cáritas Tres Avemarías hace lo que puede y más para ayudar a nuestros hermanos más desfavorecidos, solventando situaciones angustiosas, pero no somos más que un parche. Quien tiene los medios para intentar cambiar esta situación son las distintas administraciones del Estado. Administraciones que se han escondido en sus despachos detrás de un teléfono. Intenten pedir hora en cualquier administración, tómense una tila que va para largo.

Quiero aprovechar este foro para denunciar (lo que nuestros beneficiarios llaman) la estafa del INGRESO MÍNIMO VITAL. Es una vergüenza que a fecha de hoy haya 900.000 familias, que suponen casi 3.000.000 de personas sin contestación a su petición. Algo se ha hecho muy mal.

En Cáritas Tres Avemarías hemos realizado más de 100 peticiones del IMV a nuestros beneficiarios. Empezamos el 15 de junio, a día de hoy no tenemos ninguna contestación, ni positiva ni negativa.

Por favor cuídense y extremen las medidas de seguridad, por sus familiares y por ustedes.

Mucha fuerza y que Dios les bendiga.

PAZ Y BIEN

LUCÍA VIVANCOS MARTINEZ
DIRECTOR DE CÁRITAS TRES AVEMARÍAS

Noticias de Totana

El 6 de diciembre, Totana cumple 35 ediciones corriendo el Día de la Constitución

Se celebrará del 29 de noviembre al 10 de diciembre, respectivamente

Este procedimiento afecta a los lotes números 1 y 3, referidos a las Casas del Corredor del Santiago y Casa del Ingeniero